INTRODUCCIÓN.
1. El malestar docente es un libro que intenta ayudarnos a analizar los principales indicadores para identificar el malestar de los profesores. Para ello, indica una vía, para mitigar el malestar, la cual consiste en definirlo, haciendo una reflexión sobre el papel actual que tiene el educador, el cual es infravalorado, en el momento histórico en el que nos ha tocado vivir.
2. En la introducción del libro, Esteve, compara a un actor que está en un escenario, representando una pieza de teatro y, de pronto le cambian el decorado, con un profesor, pues cualquier cosa que cambie en el entorno en el que el docente da clases, puede dejarle con un papel incongruente.
3. El autor de El malestar docente es José Manuel Esteve Zarazaga. Es catedrático de Teoría de la Educación en la Universidad de Málaga. En dicha Universidad ha desempeñado los cargos de Vicedecano de la Facultad de Filosofía y Letras, Director del ICE, Decano de la Facultad de Ciencias de la Educación y Secretario General de la Universidad.
Es autor de libros:
Autoridad, obediencia y educación. Madrid. Narcea, 1977.
Lenguaje educativo y teorías pedagógicas. Madrid. Anaya, 1979.
Influencia de la publicidad en TV sobre niños. Madrid. Narcea, 1979.
Profesores en conflicto. Madrid. Narcea, 1984.
La formación del sentido crítico. Buenos Aires. Docencia, 1986.
El malestar docente. Barcelona. Laia, 1987,1989. 3ª edición. Paidós,1994.
Obtuvo en 1993 el Premio Nacional de Investigación Educativa de la Fundación Paideia.
Profesor visitante en las Universidades:
Universidad de Lisboa.
Universidad de Coimbra.
Universidad Hebrea de Jerusalén.
Universidad de Birmingham.
Universidad de Mons.
Universidad Católica de Chile.
Centro Internacional de Estudios Pedagógicos. París.
Universidad de Friburgo.
CAPÍTULO 1.
LA FUNCIÓN DE UN ENFOQUE TEÓRICO.
En éste capítulo el autor hace referencia a un estudio de las investigaciones realizadas sobre las condiciones en que se ejerce la docencia, desde varios enfoques; el interdisciplinar y el sociológico.
En el enfoque interdisciplinar, se habla del estrés de los educadores y el aumento de ansiedad entre ellos.
En el sociológico, se interesa por los cambios que ha sufrido la docencia. Estos estudios sociales tienen un enfoque de los problemas actuales, tales como, la violencia en las aulas, el agotamiento físico o psíquico, etc.
Tras este pequeños análisis de las investigaciones, Esteve indica la importancia que la teoría tiene, porque nos sirve para saber interpretar los datos obtenidos, y además sirve para la construcción de un modelo epistemológico con el que ordenar el esfuerzo de los futuros proyectos experimentales, los cuales servirán para diseñar unas pautas de intervención que aspiren a diseñar los problemas.
CAPÍTULO 2.
INDICADORES DEL MALESTAR DOCENTE.
Factores de 2º orden.
El autor, a la hora de clasificar los factores, se atreve a la clasificación establecida por Blase, en la cual se diferencian los factores de primer orden y los de segundo orden.:
Primer orden; se refiere a los factores que inciden directamente sobre la acción del profesor.
Segundo orden; se refiere a las condiciones ambientales, al contexto en que se ejerce la docencia,... los cuales influyen en la motivación del profesor, de manera indirecta.
Dentro de este apartado, el autor realiza un análisis sobre el profesor. En este sentido indica que el rol del profesor se está modificando, ya que en los últimos años, se han incrementado las responsabilidades y exigencias que recaen en la figura del profesor. Este aspecto, supone una fuente importante de malestar.
Posteriormente, el autor, dice estar de acuerdo con Merazzi, el cual propuso una tesis, sobre la competencia social de los enseñantes. (Capacidad de vivir y asumir situaciones conflictivas). Dicha tesis se basa en tres hechos:
1. En primer lugar; en la transformación y evolución de los agentes tradicionales de la socialización, que ha dimitido de la educación, recayendo ésta en la escuela. Un ejemplo de ello, es la incorporación masiva de la mujer al trabajo, lo que implica una transformación de la familia.
2. La variación de los papeles tradicionales asignados a las instituciones escolares. Pues antes, sólo salía información de la figura del profesor, y actualmente, la caja tonta se encarga también de ello. Aunque muchos profesores han sabido utilizar y agregar las nuevas tecnologías para cumplimentar su información, hay otros muchos que se obstinan en mantener su papel tradicional, dejando de lado las nuevas fuentes de información que podrían poner a su servicio.
3. Por último los conflictos entre las instituciones para definir su verdadero papel.
En este último aspecto, el autor define la función docente, en la cual existe un reto, que si los profesores responderán a las nuevas expectativas.
Posteriormente, el autor hace mención a Toffer el cual habla de El shock del futuro, que trata de indicar las tensiones y desorientaciones existentes por un cambio social tan rápido. En este punto el autor expone que el docente está inmerso en este shock.
Una idea, a mi parecer importante, que expone el autor es el cambio de papel del profesor por la presión del cambio del contexto social. Se indica, que anteriormente los padres se esforzaban en inculcarles a sus hijos, la disciplina, el respeto,... pero actualmente, éstos consideran totalmente culpables a los educadores, de que sus hijos no hayan adquirido estos principios. Por este motivo, el papel del educador no es reconocido, ya que no se le valora su trabajo desde un juicio explícito. De este modo, muchas fuentes de los problemas de éstos son: salarios, relaciones con alumnos y sobrecarga de trabajo, además del continuo avance del saber.
Las nuevas funciones que el contexto social exige a los educadores, suponen un gran dominio de distintas habilidades. En este sentido el autor critica al sistema de enseñanza, ya que seleccionan a éstos por su capacidad cognitiva.
Por último, dentro de los factores de 2º orden, el autor critica a los medios de comunicación, porque considera que éstos, reflejan un enfoque equivocado de la profesión docente, ya que el profesor suele ser idealizado como amigo o consejero. En la vida real es muy distinto, aunque sería la imagen ideal de la enseñanza, porque los profesores novatos crean sus ideales pedagógicos durante los primeros años, los cuales son los peores ya que se les asignan las peores clases o escuelas, estos ideales no corresponden con los asimilados durante su formación. Con lo que este enfrentamiento entre lo ideal y lo real, lo estudia Abraham, y según él producirá:
a) Predominio de sentimientos contradictorios.
b) Negación de la realidad.
c) Predominio de la ansiedad.
d) Aceptación del conflicto como una realidad objetiva.
Factores de 1er. Orden.
Dentro de estos factores, el autor destaca las limitaciones en las que se encuentran los profesores, debido a la falta de recursos materiales y la carencia de recursos para encontrarlos. Otros problemas con los que se encuentran los docentes son la conservación del mobiliario, edificios,... aunque según Esteve el gran problema recae en los horarios.
Con respecto al problema de conservación del mobiliario, es difícilmente solucionable, debido al aumento de la violencia en las aulas, culpando el autor, no sólo a los alumnos sino también a los padres.
Dentro de estos factores, el autor menciona también el agotamiento docente y la acumulación de exigencias al profesor, donde el agotamiento se da como consecuencia del malestar docente y su causa principal es la falta de tiempo.
Otros aspectos negativos que el autor destaca son las depresiones, ansiedades y neurosis.
Por último Esteve propone que para una educación con calidad, hace falta implicación personal.
CAPÍTULO 3.
CONSECUENCIAS DEL MALESTAR DOCENTE.
3.1 Absentismo laboral y abandono de la profesión.
El absentismo y la inhibición son las razones más frecuentes para acabar con la tensión que se deriva del ejercicio docente, según el autor. Para Esteve estos casos afectan a una gran mayoría de profesores de E.G.B. Entonces el absentismo es considerado una forma de buscar un respiro que permite al profesor escapar de las tensiones acumuladas. Entonces después se recurre a la petición de bajas laborales, en periodos cortos.
Las peticiones de bajas y aumento de absentismo se han relacionado con los ciclos de estrés que se han identificado a lo largo del curso. Varios estudios realizados indican que los finales de trimestres y final de curso, tanto por la acumulación de tensión, como por las evaluaciones son los periodos con más incidencia. En estas estadísticas se reproducen siempre los gráficos de tres picos (Máxima ausencia y bajas son: Octubre, Febrero y Junio). Según el autor otra forma de huidas señalada es la petición de traslado, mediante las cuales los profesores rehuyen de los centros conflictivos y de las malas relaciones con los demás. Según Gosselin los profesores debutantes comienzan su carrera en los puestos más difíciles.
Todos estos aspectos pueden terminar según Esteve en el abandono de la profesión.
Existen otros autores como Stern y Nicholls, que indican que el absentismo tiene otras causas como la baja motivación del trabajo. Nicholls hizo referencia al dogmatismo que es un buen procedimiento defensivo para los profesores que tienen ansiedad.
3.2 Repercusiones negativas de la práctica sobre la salud.
En primer lugar, hay que mencionar que las repercusiones de la tensión a las que está sometido el profesor, varían según la experiencia, status, sexo,...
Con respecto al nivel de los centros, existe mayor tensión, mayor número de conflictos y mayor incidencia del estrés, entre los profesores de secundaria. Mandra y Breuse, coinciden en señalar que existe mayor tensión entre profesores entre 6 y 9 años de antigüedad. Existe una menor tensión entre los menores, porque durante sus primeros años mantienen sus ilusiones, y es después cuando sufren una verdadera crisis de identidad, donde el profesor redefine el sentido y los objetivos de su actuación.
En cuanto al sexo existen claras diferencias entre hombres y mujeres, aunque como sostienen Kyriacov y Sodcliffe existen pocas diferencias de salud, pero las mujeres sufren continuos llantos, dolores de cabeza...
La mayoría de los autores como Mandra, o el propio Esteve, que han utilizado el MISPE, llegan a la conclusión que por el conjunto de factores sociales y psicológicos, los profesores sufren las consecuencias de estar expuestos a un aumento de tensión, por la fragmentación de la actividad y el aumento de la responsabilidad. Estas consecuencias del malestar docente son:
Desarrollos de esquemas de inhibición.
Sentimiento de insatisfacción ante los problemas de la enseñanza.
Deseo de abandonar la docencia.
Absentismo laboral.
Ansiedad.
Estrés.
Autoculpabilización por la enseñanza.
Neurosis.
Depresiones.
Todos estos problemas pueden variar por el sexo, status, experiencia.
3.3 Enfermedades de los profesores.
Los problemas de salud de los profesores han sido estudiados a lo largo de los cursos 82-83 y 83-84, utilizando los ficheros de la Inspección Médica de la Delegación de Educación y Ciencia de Málaga. El estudio ha incluido las bajas oficiales por enfermedad entre una población de 6.483 profesores. Según estos estudios, las fuentes de bajas más importantes son: Traumatología, genitourinarios y obstétricos y neuropsiquiátricos, sin embargo al estudiar estas bajas, hay que tener en cuenta que muchos profesores son trasladados a trabajos administrativos alejándolos de las aulas. Este autor afirma que la mayoría de los profesores afectados es por causa de las infecciones otorrinolaringólogas.
Otro aspecto a considerar es que los profesores afectados por bajas laborales, existe una mayor incidencia entre los de E.G.B. y enseñanzas medias. Estas bajas podrían interpretarse por las causas de las distintas condiciones de trabajo, tanto por las bajas retribuciones como por el número de horas lectivas. Se produce de este modo la relación inversa entre enfermedad y status social.
Tras las comparaciones de las enfermedades en función del sexo, existe una mayor incidencia en las mujeres, teniendo que considerar el peso que tiene las bajas ginecológicas. Según se indica, los profesores varones están más afectados por enfermedades clasificadas como digestivas o cardiovasculares. Por el contrario las bajas por diagnóstico genitourinarios y obstétricos se disparan en contra de las mujeres.
Como conclusión de este capítulo Esteve indica que la mayoría de bajas son de mujeres que pertenecen a E.G.B., y durante los días anteriores al fin de semana.
CAPÍTULO 4.
EVOLUCION DE LA SALUD DE LOS PROFESORES DE 1.982 y 1.989.
En este capítulo el autor expone varios estudios realizados buscando estudiar las principales tendencias que, a lo largo de 7 años, pueden caracterizar la evolución de la salud de los profesores. Para esta investigación se ha trabajado con el total de la población de profesores de E.G.B. y de EE.MM. de Málaga y provincia.
Con respecto a la Incidencia de bajas por nivel de enseñanza, se indica que los profesores de E.G.B. se ven más afectados por las bajas que los de Enseñanza Media, existiendo una mayor incidencia de las bajas en las mujeres.
Si hablamos de la Incidencia de las bajas por sexo, las mujeres se ven más afectadas por enfermedades, a lo largo de estos siete años, exceptuando las causas por enfermedad digestiva y cardiovascular, en la que existe mayoría de hombres.
En cuanto a la edad media de los profesores en baja, cabe destacar que en 1.982 estaba datada en cuarenta años. Con el paso del tiempo, Esteve señala que ha disminuidos en 0,2.
Haciendo referencia a la duración media de las bajas, podemos decir que las bajas evolucionan en sentido descendente a lo largo de estos años. En 1.982 las bajas tenían una duración media de 41 días. Esta ha disminuido a 26 días en 1.989. Esto se debe al aumento de control sobre las bajas de los profesores, con frecuentes inspecciones médicas.
Referente a los diagnósticos mas frecuentes en las bajas por enfermedad, según Esteve, señala las bajas traumatológicas, otorrinolaringólogas y psiquiátricas. En cambio los esguinces de tobillo, laringitis y las depresiones, aparecen como los diagnósticos más frecuentes. Las bajas ginecológicas aparecen en segundo lugar.
Con respecto a los ciclos de estrés y su relación con las bajas por enfermedad, el hecho más significativo que considera Esteve, es el aumento a comienzos de trimestre y que un período de vacaciones suele romper el período de acumulación de tensión, y consecuentemente el aumento de números de bajas.
CAPÍTULO 5.
HACIA UN MODELO TEÓRICO COMPRENSIVO DEL MALESTAR DOCENTE.
La importancia de un modelo teórico es doble. Por una parte el intento de sistematizar la enseñanza. Por otro lado, hay que considerar el valor de los trabajos, permitiendo un avance en las investigaciones.
El modelo que el autor propone es una mezcla entre el modelo de Blase y el modelo de Polonio, donde ambos relacionan las condiciones sociales y psicológicas donde se ejerce la docencia.
El modelo de Blase parte de la relación entre motivación y eficacia del profesor. Esteve indica que este modelo tiene limitaciones ya que algunos recurren a la no implicación en la enseñanza.
El modelo de Polonio explica la génesis de la conducta ansiosa del profesor, condicionadas por diversos factores exteriores (tarea educativa, objetivos de la enseñanza, personalidad del profesor...), que son los que hay que mejorar. Éste diferenció tres tipos de ansiedad:
1. Respuestas fisiológicas de ansiedad.
2. Ansiedad de expectación.
3. Ansiedad como estado.
Esteve para concluir indica que ambos modelos influyen en la personalidad de los educadores.
El modelo que se propone considera las dificultades que inciden negativamente sobre la interacción profesor-alumno. Dichos factores son los de primer orden y segundo orden, ya analizados anteriormente.
Así se considera dos posibilidades: que el proceso de formación inicial prepare adecuadamente al profesor, desde el punto de vista teórico y práctico, o bien que dicho proceso no capacite al profesor para dominar con éxito los problemas.
Todas las investigaciones remiten a un problema: que la práctica de la enseñanza presenta dificultades. Otro aspecto que se tiene en cuenta en este modelo es la implicación personal del profesor en el trabajo que realiza. En los casos que existe implicación personal hay dos vías alternativas:
1. Que el profesor posea unos recursos adecuados para dominar las situaciones de enseñanza a las que se enfrenta. En este grupo los profesores mantienen una conducta integrada, y mantienen su motivación y esfuerzo.
2. Que el profesor carezca de la formación inicial necesaria para ser eficaz. En este caso el profesor acumulará tensiones y dificultades.
CAPÍTULO 6.
ESTRATEGIAS PARA EVITAR EL MALESTAR DOCENTE.
En este último capítulo, Esteve distingue dos planteamientos en la presentación de posibles soluciones:
1º) Hacer un planteamiento preventivo, dirigido a las nuevas generaciones de enseñantes, para que en su primer año de docencia no se encuentren desorientados dentro de la enseñanza, y que carezcan de recursos para dominarlos.
2º) Articular unas estructuras para ayudar al profesorado en ejercicio.
En el proceso de formación inicial, se establecen tres grandes maneras de actuación en el proceso de formación previo al trabajo docente.
a) Pruebas selectivas basadas en criterios de personalidad.
b) Sustituir los enfoques normativos idílicos, por enfoques de la formación inicial netamente descriptivos. Estos enfoques intentan crear al buen profesor transmitiéndole lo que debe hacer, pensar y evitar. El profesor formado desde el enfoque normativo, tiende a autoculpabilizarse, porque desencaja con la imagen del buen profesor.
c) Buscar una mayor adecuación de los contenidos de esa formación a la realidad práctica.
Un aspecto que refiere el autor, es que la mayoría de las motivaciones en la elección de la carrera docente, es: tratar con niños, mejorar la sociedad, y por la vocación, aunque Amiel piensa que la elección de esta profesión es por influencia familiar y por la seguridad en el trabajo.
En definitiva se coincide en señalar la importancia de una selección inicial, basada en las capacidades intelectuales, motivacionales y de personalidad.
En cuanto a los problemas prácticos que suelen tener los educadores novatos son:
1) Identificación de sí mismo por parte del profesor, conocer y aceptar las limitaciones, mejorando los estilos de enseñanza que el profesor adopte y reorientando los existentes.
2) Disciplina.
Puesto que a los nuevos enseñantes se les conceden las peores aulas, esto significa para ellos un choque tremendo para enfrentarse a la realidad. Éste irá mejorando con la experiencia, y los enfoques descriptivos han desarrollado técnicas para aumentar la seguridad en sí mismo, basadas en la actuación y aprendiendo destrezas sociales en situaciones simuladas.
Los problemas más peculiares con los que se enfrentan los principiantes son:
Dificultad para flexibilizar la enseñanza.
Dificultad de adaptar los contenidos de la enseñanza a niños de niveles diferentes
Dificultad para identificar los objetivos adecuados a la edad y nivel escolar
Dificultad para contactar con los demás.
Dificultad para organizar su propio trabajo.
Dificultad para integrar los elementos de motivación personal.
En cuanto a las estrategias para evitar el malestar docente en el proceso de formación permanente del profesorado, cabe destacar que resulta muy importante ser aceptado por los padres de los alumnos, los alumnos y demás educadores, comenzando entonces la identificación personal. La comunicación es la vía de más importancia para este aspecto, sin embargo es el aislamiento la característica más común del malestar. Como bien indica el autor, resulta de suma importancia, para superar el malestar, las condiciones en que se ejerce el trabajo y el apoyo de los demás.
CONCLUSIÓN Y VALORACIÓN PERSONAL.
Este libro, es un estudio muy detallado de las facetas que se pueden derivar de una búsqueda exhaustiva de información acerca del malestar docente. Considero que el autor ha ejercido un gran trabajo de recopilación de datos médicos y estadísticos para conseguir llevar a cabo esta obra.
A continuación, quiero decir, que este libro refleja con gran claridad los distintos problemas con los que se encuentra el personal docente a la hora de ejercer su trabajo, aunque opino, que lo realmente difícil es intentar solucionarlos.
Estoy de acuerdo con el autor en que lo primero que condiciona la docencia es el entorno social del que pertenece la clase. Y evidentemente si el lugar de trabajo es un barrio desfavorecido, en el que hay droga. La droga entrará en el colegio, y entonces habrá que pensar en estrategias para intentar enfrentarse a ello. Si el lugar de trabajo es una zona en la que la violencia forma parte de la vida cotidiana de los alumnos, la violencia, de alguna forma, traspasará las aulas. Y así el resto de los problemas sociales que cada vez más, nuestra sociedad acumula y espera que los profesores los solucionen.
Considero que Esteve también tiene razón en este punto; en que cada vez que la sociedad tiene algún problema, intenta convertirlo en un problema educativo y que sea la Educación la que lo solucione, bajo mi punto de vista no es así, pues si el problema es político, que los solucionen los políticos, aunque reconozco que la mayoría no piensan como yo, y consideran que lo más fácil es atribuirle los problemas a los educadores.
Una posible solución que considero importante es la que se propone en el libro, en que la selección del personal no se centre sólo en las aptitudes memorísticas e intelectuales, pues antes que una persona que transmita conocimientos debe ser humano.
Todos los problemas planteados en este libro, te hacen recapacitar, si uno mismo podrá superarlos par ejercer correctamente la docencia. Esperemos que sí, que sepa estar a la altura de las circunstancias, pues ese es mi mayor deseo.